Los más de 300 trabajadores que acuden a la asamblea aprueban movilizarse a la hora del desayuno y convocar una manifestación • Los representantes sindicales piden la unión de toda la plantilla
• El sindicato SPPME-A sostiene que el estado de la jefatura es tercermundista
Los cuatro sindicatos con presencia en el Ayuntamiento -CCOO, UGT, USO y SPPME-A de la Policía Local- retomarán las movilizaciones por el impago de la nómina municipal tras aprobarlas ayer los trabajadores en asamblea.
A la asamblea, que se celebró en el Palacio de Congresos y Exposiciones, asistieron más de 300 empleados del Consistorio -muchos más que en otras ocasiones- que aprobaron protestar por las mañanas, durante una hora y coincidiendo con la hora del desayuno a partir de mañana o el jueves, y que los sindicatos inicien los trámites para convocar una manifestación a gran escala y con la implicación de partidos políticos en la oposición, asociaciones y entidades y organizaciones sindicales.
El enfado entre los trabajadores asistentes era patente, ya que la mayor parte de la plantilla seguía ayer sin percibir el 40% de la nómina de diciembre. Además, el equipo de gobierno todavía no ha sido capaz de abonar la extraordinaria de Navidad, la media paga de los laborales y la extra de la limpieza.
El secretario provincial de la FSP-UGT, José Porras Naranjo, fue el primero en intervenir. Además de volver a condenar lo ocurrido en el último pleno, cuando mandos de la Policía Local intentaron sacar a la fuerza a varios sindicalistas, recordó que la recta final hasta las elecciones municipales del 22 de mayo “ya ha comenzado” y que, por tanto, “la plantilla debe unirse y empezar a presionar cuanto antes. Dentro de poco, todo será política pura y dura. Si llegamos a mayo sin estar al corriente en el cobro, nuestra situación tardará meses en regularizarse. Hay que presionar a este equipo de gobierno para que no mienta más y hacerlo juntos, para que el alcalde no tenga motivos para decir que no tenemos apoyo”, apuntó.
Por su parte, el secretario comarcal de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Jesús González Aragón, calificó de “alarmante” la situación económica municipal. “Las retenciones del Estado son del 100% y hay rumores de que el dinero de la participación en los impuestos de la Comunidad autónoma, unos 2,8 millones, serán para concesionarias que se han ido y no han cobrado. A eso hay que añadir que ya se han gastado el dinero de Diputación”, alegó.
De otro lado, Eugenio Martín, de USO, uno de los sindicalistas a los que el jefe de la Policía Local, Carlos Fernández, intentó expulsar a la fuerza del pleno del pasado jueves, también llamó a “la unión” de la plantilla y criticó la actitud del equipo de gobierno, asegurando que sus miembros tienen “muy poca vergüenza”.
Por último, el presidente del SPPME-A, Juan Carlos Serrano, señaló que la plantilla municipal debe demostrar “que no está de acuerdo con lo que está ocurriendo en el Ayuntamiento. Queremos cobrar en tiempo y forma y eso hay que pedirlo todos unidos”, puntualizó.
Este sindicato defendió además en una nota su manera de proceder durante el pleno del pasado jueves, en el que hubo un intento de desalojo a delegados sindicales y por lo que el Ayuntamiento ha anunciado que interpondrá una querella: “El comportamiento de los agentes que protestaban fue correcto. No se atentó contra nadie ni se faltó el respeto a ningún concejal. Tampoco se impidió la entrada al pleno ni se causó desorden”.
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