La CSI y USO condenan la espantosa represión en Siria

Tiempo de lectura aproximado: 2 minutos

USO respalda la denuncia efectuada por la CSI sobre la brutalidad de la represión en Siria, cada vez más violenta, y expresa su solidaridad con el movimiento de huelga general lanzado este fin de semana en la ciudad de Hama.

Según las agencias de prensa AFP y Reuters, los habitantes de la ciudad de Hama siguen desde el sábado una consigna de huelga general de tres días, en conmemoración a las decenas de civiles asesinados por las fuerzas de seguridad en el curso de las manifestaciones que reclaman reformas democráticas.

“Semana tras semana, desde el principio del movimiento de protesta contra el régimen dictatorial sirio, la represión se está volviendo más feroz, despreciando por completo la vida humana”, constata Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI. “Desafiando el miedo de una represión de una crueldad despiadada, la población de la ciudad, ya mártir, de Hama está dando prueba de una valentía impresionante al utilizar el arma pacífica de la huelga. Nos gustaría que escucharan nuestro mensaje de solidaridad”, prosigue Sharan Burrow.

“El régimen sirio también hace oídos sordos a los mensajes de contestación cada vez más amplios que manifiesta la población a través de todo el país, así como a las presiones y sanciones internacionales. Frente a esta escalada de violencia represiva sin límites, la comunidad internacional debe endurecer aún más las presiones y sanciones contra este régimen que tendrá que dar cuentas de esos actos punibles con respecto al derecho internacional”, añadió.

En Hama, a 210 Km. al norte de la capital Damas, se han interrumpido todas las actividades, incluso las grandes tiendas están cerradas, según los testimonios recogidos por AFP y Reuters. El viernes, ante una manifestación de protesta en la que se reunieron más de 50.000 personas, la represión se cobró más de 60 víctimas. El sábado más de 10.000 personas asistieron a sus funerales, y otras diez víctimas perecieron de nuevo en Hama el sábado, alcanzadas por las balas de las fuerzas de seguridad. Recordemos que en 1982 el régimen de Hafez el Hassad había cometido en la ciudad de Hama una masacre en el curso de la cual, en cuestión de 24 horas, perdieron la vida más de 20.000 personas. El domingo la represión se volvió a cobrar 28 víctimas más en el norte del país.

Según las cifras de las ONG, adoptadas por las Naciones Unidas, el balance total desde el comienzo del movimiento de protesta a mediados de marzo es de más de 1.100 muertos y miles de arrestos acompañados de tortura.

“Es preciso detener esta masacre y que se levante la capa de plomo en la que se encuentra atrapado el país. La prensa internacional, así como las organizaciones humanitarias y de defensa de los derechos humanos tienen que poder hacer su trabajo. Las aspiraciones del pueblo sirio con relación a sus libertades fundamentales y a la justicia social son legítimas e ineludibles”, concluyó Sharan Burrow.

LSB-USO
Siguenos en: