Trabajadores de tres juzgados penales de Lleida han expresado su malestar por trabajar a más de 30 grados, un calor que es debido a las obras que se están llevando a cabo en el edificio para proceder al cambio de las antiguas máquinas de climatización.
Al parecer los funcionarios llevan soportando desde el lunes 9 de junio temperaturas superiores a los 30°C, hecho que ha propiciado que denuncien la situación ante la Inspección de Trabajo.
La Normativa de Salud Laboral establece que la temperatura máxima de los espacios en los cuales se pueden llevar a cabo trabajos de oficina no puede ser superior a los 27°C.
Después de recibir numerosas quejas de los trabajadores, las cuales, hasta el momento, no habían sido atendidas por los Servicios Territorial de Justicia de Lleida, los sindicatos han hecho efectiva una denuncia ante la Inspección de Trabajo.
El inspector de guardia, con el correspondiente técnico, se han personado en los juzgados Penales de Lleida y han llevado a cabo comprobaciones de la temperatura en cada una de las dependencias, constatando el excesivo calor y las elevadas temperaturas, que rondan los 30 grados.
En este sentido, los trabajadores han instado a la Administración a que tome medidas inmediatas para resolver el problema que pone en riesgo la salud de los mismos trabajadores.
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