La tasa de desempleo juvenil en España, la más alta de la Unión Europea junto con la de Grecia, responde entre otros factores a que la formación de los jóvenes no se adecúa a las necesidades del mercado de trabajo.
Esta es una de las principales conclusiones a las que llegan la decena de expertos del mundo de la economía, la sociología y la empresa privada que ha participado esta semana en el “Diálogo Bertelsmann” sobre el desempleo juvenil, en el que se ha abordado las implicaciones de la generación “ni-ni” para España.
Pero no es la única. La caída de la demanda a consecuencia de la crisis y la elevada temporalidad también explican este fenómeno, ya que, cuando las empresas tienen problemas, lo primero que hacen es despedir a los temporales, normalmente a los más jóvenes.
La directora de la fundación Bertelsmann, Clara Bassols, entidad centrada en mejorar la empleabilidad de los jóvenes, destaca la importancia de los factores de demanda.
“Hasta 2007 predominaban los trabajos en sectores intensivos en mano de obra que requerían de una baja cualificación y las tasas de desempleo por nivel de formación no tenía diferencias significativas. Pero eso cambia a partir de 2008, donde la formación se convierte en un elemento clave para adecuar la mano de obra a las necesidades de las empresas”, matiza.
Según Bassols, actualmente hay un “importante desajuste formativo” en España, donde la formación media es muy baja mientras que la alta es la más elevada de Europa.
Por eso, la directora de la fundación Bertelsmann defiende la implantación de la Formación Profesional (FP) Dual, un modelo arraigado en países como Suiza, Austria y Alemania -el país con una tasa más baja de desempleo juvenil de la UE-, que proporciona a los estudiantes formación en la propia empresa y un contacto con la realidad laboral, lo que aumenta su empleabilidad.
Sin embargo, este sistema no sólo beneficia a los estudiantes. El gerente de formación del grupo Seat, Manuel Moreno, confiesa que su empresa ha implantado la FP Dual basándose en el modelo alemán y van más allá de los programas reglados en España y no porque sean una “ong”, sino porque les resulta más rentable.
“Es mucho más barato asumir los costes laborales de un alumno mientras hace la FP Dual que la improductividad del empleado una vez es contratado”, advierte.
La Cámara de Comercio Alemana para España asesora a Seat y a otras empresas que quieran seguir su camino.
El director gerente de la institución, Walther von Plettenberg, defiende la implantación de un tercer año en los programas de FP Dual en España, lo mismo que se hace en Alemania, ya que hay muchas empresas que no participan en este sistema al entender que en este periodo los alumnos no pueden aprender determinados oficios.
“El Gobierno ha hecho una gran labor para arrancar esta senda. Ahora el siguiente paso es pasar a los tres años y trabajar para erradicar la estúpida estigmatización del sistema de FP, que se conseguirá cuando entren buenas empresas”, insiste Von Plettenberg en declaraciones a Efe.
Este planteamiento lo comparten ya otras grandes empresas como NH Hoteles, Vips y filiales españolas de empresas alemanas como Siemens, aunque también participan otras de menor tamaño. En total 2.000 empresas españolas se han adherido.
Según Clara Bassols, otro de los problemas es que los alumnos españoles reciben poca formación y orientación a la hora de elegir las profesiones que desean desarrollar en el futuro.
“Hay muchos más universitarios que los que demanda el mercado y hay un hueco muy importante en la FP y si las empresas se quejan de que no encuentran profesionales con la formación que necesitan es que algo está fallando en la orientación profesional de los jóvenes”, apunta.
Desde la fundación Bertelsmann están impulsando un sistema de orientación profesional con la colaboración de la patronal CEOE que se encuentra en fase piloto en 30 centros de Cataluña, Madrid y Andalucía.
