Primero de Mayo 2018: Los salarios, la deuda pendiente – Soldatak, entregatu gabeko zorra

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Con el lema: “Los salarios, la deuda pendiente. Soldatak, entregatu gabeko zorra.”, la Organización Sindical LSB-USO ha exigido en la mañana de hoy en una manifestación por la Gran vía de Bilbao que la ciudadanía tiene que recuperar lo que nos deben a los trabajadores/ras porque es la deuda pendiente: los salarios, para que la recuperación económica llegue a las personas y puedan proyectar un futuro digno, luchando por la mejora integral de las condiciones de vida y trabajo.

El sindicato LSB-USO de Euskadi también ha aprovechado este año el Primero de mayo para resaltar la necesidad de la movilización de la clase trabajadora en contra de la destrucción de empleo estable porque el empleo creado en estos últimos años es de bajísima calidad mientras se incrementan los beneficios empresariales y mientras que el peso de los salarios respecto al PIB solo alcanza el 47%, el menos nivel desde 1989.

La recuperación en los índices económicos y en los resultados de las empresas no están teniendo su reflejo en el aumento significativo del gasto social ni en el incremento de los salarios. Al contrario, los servicios públicos no están a la altura de las necesidades de los ciudadanos y los salarios acumulan descensos desde la excusa de la crisis.

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Además, en el mitin final celebrado tras la manifestación frente al Palacio de Justicia la Secretaria General, MariBel Muñoz Aribayos ha realizado las siguientes manifestaciones:

Para 2018, a pesar de los llamamientos alertando de la necesidad de incrementar los salarios que han realizado la CES, CSI y otros organismos internacionales, esos agentes no han sido capaces de pactar un incremento salarial. Asisten a negociaciones a puerta cerrada, con absoluto oscurantismo, mientras que la supuesta recuperación pasa de largo y ni roza los salarios de los trabajadores y trabajadoras. No nos olvidemos de ese 13% de personas que, a pesar de tener un empleo, perciben una renta inferior al umbral de la pobreza.

A esta negociación se suma un incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para los próximos tres años que, además de ser deficiente, está condicionado al aumento del PIB y de la afiliación a la Seguridad Social. Un incremento más propagandístico que efectivo, sin subir el Indicador Público de Renta a Efectos Múltiples (IPREM), que afecta al cálculo de la mayor parte de ayudas públicas y prestaciones sociales, y que está congelado desde 2010.

La bajísima calidad del empleo creado afecta de manera muy incisiva en la JUVENTUD, una generación que no mejorará su vida con respecto a sus predecesores y a los PARADOS y de manera especial a los de larga duración o edad avanzada, otro colectivo que ha sufrido los efectos de las dos últimas reformas.

El empleo que está surgiendo es de corta duración, parcial y exclusivamente un 10% son de carácter indefinido, precarios, mientras “el rico cada vez es más rico, el pobre cada vez más pobre”. Es triste reconocer que el problema no es la falta de riqueza, si no, su injusta distribución.

Por ello, este 1º de Mayo hemos pedido “LOS SALARIOS, LA DEUDA PENDIENTE. “SO”DATAK, ENTREGATU GABEKO ZORRA”, por ser justo, necesario y el momento de recuperar poder adquisitivo de nuestros salarios, de nuestras pensiones y retribuciones públicas, de avanzar en cantidad y calidad en el empleo, en una verdadera justicia social.

Insistimos en que la verdadera recuperación no será una realidad hasta que los salarios salgan de la crisis.

Días como hoy, con la clase trabajadora llenando las calles de las ciudades, el Gobierno debe tomar nota para realizar una Reforma Laboral en pro de los trabajadores/ras que mantienen el país.

LSB-USO
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