El comité de Vitrasa denuncia incumplimientos y se plantea volver a las movilizaciones

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El comité de empresa de Vitrasa se plantea volver a las movilizaciones casi un año después de que se firmara el acuerdo con la concesionaria del transporte público urbano de Vigo, sin que se haya cumplido la mayor parte de lo pactado. “El principal problema laboral siguen siendo las eventualidades, las horas extra y los descansos en todas las líneas, que a día de hoy no se han solucionado. Sí que se efectuaron algunas contrataciones indefinidas, pero no las suficientes para evitar las horas extra de los conductores.

Con las que realizamos, daría para contratar al menos a otros 30 chóferes. Estas jornadas se van cubriendo con eventuales en rotaciones de seis meses de contrato y un año al paro, sin contemplar siquiera un orden de antigüedad a la hora de llamarlos”, denuncia Fernando Pérez, vicepresidente del comité de empresa por USO.

La sección sindical de USO destaca que “el compromiso de la empresa en 2018 era insuficiente, tal y como denunciamos desde USO y CIG, que no lo firmamos, pero es que no están cumpliendo ni eso: no se está garantizando el descanso en todas las líneas después de remodelar las líneas, y eso atenta directamente contra nuestra seguridad y la de todos los pasajeros”. Con el paso de este año, además, se han añadido nuevas problemáticas, a las que Vitrasa tampoco da solución: “con la implantación del registro de jornada, la empresa se está negando a compensar las horas de retraso en los cambios de turno en el de la mañana y a solicitarlas por escrito cuando es en el turno de noche, a pesar de que se realiza ese registro. Y tampoco están dando solución, tanto Vitrasa como el Concello, a las implicaciones de seguridad que entraña la incorporación del carril bici compartido con el autobús urbano”, continúan exponiendo los delegados de USO.

Además, persisten los incumplimientos en materia de igualdad y salud laboral: “el plan de igualdad sigue caducado desde 2014; en algún componente del uniforme sí se cambió el tejido, pero sigue sin ser el adecuado para la piel; y solo se ha colocado un váter químico en una de las cabeceras, dejando el resto de servicios higiénicos pendientes sin ejecutar y que ascendían a diez”, explican.

Por último, Fernando Pérez quiere lanzar un mensaje a la ciudadanía, “la principal afectada si finalmente tenemos que ir a la huelga, pero también la principal afectada de la falta de seguridad en el servicio. En el conjunto de nuestras reclamaciones, hay una problemática únicamente de la plantilla, pero la mayoría de ellas se deben a los riesgos que entraña la falta de prevención para los conductores, que puede revertir en la seguridad de toda la circulación de nuestra ciudad”.

LSB-USO
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